Miguel Mejía critica postura de RD ante caso de Venezuela; afirma no debió inmiscuirse
Por: María Hidalgo
Pronosticó que la ruptura diplomática será un punto negro en la historia diplomática de RD.
EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO. – El ministro de Política de Integración de República Dominicana, Miguel Mejía, criticó el manejo del Gobierno ante el caso de Venezuela, afirmando que el país no debió inmiscuirse en eso.
Mejía lamentó la ruptura de las relaciones diplomáticas entre RD y Venezuela, considerándola una señal de advertencia para el pueblo dominicano y su política exterior, que no debería injerirse en los asuntos de otros países.
“República Dominicana tiene suficientes problemas internos que debemos enfrentar sin necesidad de involucrarnos en asuntos que no nos competen y creo que eso fue lo que generó la ruptura en las relaciones entre nuestro país y Venezuela”, aseguró Mejía.
Pronosticó que esta ruptura será un punto negro en la historia diplomática de RD, atribuible a una gestión inadecuada por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores en el caso específico de Venezuela “Independientemente de la postura del gobernante de turno, siempre debe prevalecer la prudencia en el respeto a la autodeterminación de los gobiernos”, expresó Mejía.
El ministro hizo estas declaraciones durante una entrevista con los comunicadores Nadia Andújar, Jabes Ramírez, Rafael Zapata y Enrique Mota en el programa “El Nuevo Diario AM”, transmitido por la plataforma digital El Nuevo Diario TV.
Agregó que, aunque el Gobierno dominicano tiene el derecho de adoptar posturas en su ámbito soberano, no debería tomar partido en estos asuntos. “Creo que esas son competencias de los venezolanos y debemos respetar su marco institucional”.
Mejía también admitió que es válido que RD haya abierto sus puertas a los venezolanos, permitiéndoles expresar sus opiniones en el territorio nacional. Sin embargo, enfatizó que esto no debe interpretarse como una postura oficial del gobierno ni como una injerencia en los asuntos internos de Venezuela.
Afirmó que el presidente Luis Abinader debió mantener una postura neutral, desempeñando un rol de mediación desde una perspectiva imparcial.
