Este 1 de mayo histórico desde las luchas en 1886 de los Mártires de Chicago en Estados Unidos, acompañadas de manera solidaria por la clase obrera de varios países del mundo, nos sigue convocando a la unidad clasista en la diversidad para fortalecer la lucha de los trabajadores y trabajadoras que todavía son vulnerados sus derechos.
Las brutales represiones policiales, apresamientos, muertes sufridos por los hombres y mujeres en la Revuelta de Haynarket, aquel 4 de mayo en 1886, como consecuencia de intensas manifestaciones contra las inhumanas condiciones laborales que trajo consigo la Revolución Industrial en Gran Bretaña, durante el siglo XVIII, constituyen hoy un legado de dignidad y resistencia dejado por esas generaciones para las presentes.
En este contexto histórico, todos los trabajadores del mundo tienen el compromiso de reivindicar esa lucha clasista y combativa por mejores condiciones laborales y el respeto a sus derechos como generadores de riquezas y productividad. Muchos, desgraciadamente, no están bien representados en el movimiento sindical, porque sus representantes, salvo honrosas excepciones, han institucionalizado una práctica coyunturalista que deja huérfanos a los trabajadores. República Dominicana es uno de estos casos, donde el sindicalismo en su mayoría se ha desnaturalizado amparado en unas siglas.
El movimiento originario criollo representativo de nuestros trabajadores está presente en el ejemplo de entrega, sacrificio y lucha de los sindicalistas históricos, como Mauricio Baez, José Blanche, Barbarin Mojica. Julio de Peña Valdez, Francisco Antonio Santos, entre otros.
Esta fecha es propicia para reconocer la lucha, resistencia y los logros laborales de los trabajadores que, como los Mártires de Chicago, en todo el mundo han sabido enfrentar las desigualdades, las injusticias patronales tras la noble causa obrera.
¡Viva la lucha de los trabajadores por su dignidad!
Abril 30, de 2023.
